En la entrada de hoy vamos a aprender a coser las "esquinas perfectas"; esas que vemos en algunos productos comprados y que dan una apariencia super profesional a cualquier labor.
En el primer curso de costura de Ikea explicaba cómo se hacen y la gente hacía corrillo para verlo; incluso señoras que llevan toda la vida cosiendo no tenían ni idea de cómo hacerlas y se paraban a mirar. Es decir, que una vez que hayáis aprendido a hacerlas habréis ascendido un peldaño en el ranking de costureras, así que ¡venga, manos a la obra!
Os aconsejo que veáis este tutorial que, aunque está en inglés, tiene un paso a paso con fotos facilísimo: http://www.designsponge.com/2010/11/sewing-101-embroidered-mitered-napkins.html.
Nosotros vamos a hacer un sencillo mantel individual en el que practicaremos la forma de coser las esquinas y, una vez aprendidas, las vamos a poder hacer donde queramos: manteles, servilletas, cortinas, etc....
Para empezar os recomiendo que ensayéis en papel, así no tendréis ninguna duda a la hora de pasar a la tela.
Para nuestro Mantel individual vamos a necesitar:
- un trozo de tela de 51 x 36 cm (para hacer el mantel de 45 x 30 cm),
- alfileres,
- tijeras (esta vez no es necesario que sean de zigzag, ya que vamos a hacer dobladillo y quedará oculto),
- hilo del color que queramos hacer las costuras.
Lo primero que vamos a hacer es dibujar en el revés de la tela el rectángulo de 30 x 45 cm que va a ser el tamaño final. Por fuera de todo el perímetro, otra raya a 1'5 cm y otra más a 1'5 cm de la anterior. Cortamos por la línea más externa.
La cuadrícula que queda en la esquina la cortamos por la mitad en diagonal. Repetir en las otras tres esquinas.
Ahora hacemos el doblez en las 2 rayas y los planchamos para fijarlos.
Hacemos el primer doblez y lo sujetamos con alfileres.Cogemos el pico y lo doblamos hacia dentro,
y sobre él hacemos el segundo doblez, sujetándolo con alfileres o hilvanándolo para llevarlo a la máquina de coser. Si tenéis poca práctica es conveniente hilvanar, ya que así las esquinas quedarán planas y será más fácil coserlas en la máquina.
Cosemos a máquina (o a mano) procurando que la costura esté lo más al borde posible, así quedará bien sujeto el dobladillo. Podemos utilizar puntada recta o zig zag, cada uno a su gusto.
Es posible que a la primera no nos salga la esquina perfecta, pero podemos rectificar el pico y el doblez todas las veces que haga falta hasta conseguirla. Veréis que es sólo cuestión de práctica. Hacemos lo mismo con las cuatro esquinas y planchamos.
¡Y ya está, mantel terminado y esquinas perfectas conseguidas!